- Ajuste cómodo: Unas almohadillas del tamaño adecuado garantizan un ajuste cómodo durante un uso prolongado.
- Colocación segura: Ayudan a mantener los auriculares bien colocados, evitando que se caigan.
- Mejor calidad de sonido: El tamaño adecuado de las almohadillas puede mejorar la calidad del sonido al crear un mejor sellado y reducir los ruidos exteriores.
- Reducción de los ruidos exteriores: Unas almohadillas bien ajustadas pueden reducir significativamente la intrusión de sonidos externos.
- Almohadillas demasiado pequeñas: Pueden hacer que el auricular se mueva y se caiga.
- Almohadillas demasiado pequeñas para reducir el ruido: Las almohadillas más pequeñas pueden aumentar las interferencias del ruido exterior.
- Almohadillas demasiado pequeñas para la calidad de audio: Un sellado inadecuado puede provocar una pérdida de calidad de audio, especialmente en las frecuencias bajas.
- Demasiado grandes para la comodidad: Las almohadillas demasiado grandes pueden causar molestias durante largas sesiones de escucha.
- Demasiado grandes para el ajuste: Es posible que no se ajusten correctamente, lo que puede provocar inestabilidad en los auriculares y que se caigan.